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Años atrás comencé con la idea de montar esta empresa motivado por la amplia experiencia en el rubro alimenticio que he incorporado desde chico junto a mi padre, trabajé con mucho esfuerzo durante los primeros años para lograr la calidad que hoy me ha permitido llegar a grandes clientes.
Gracias a dichos esfuerzos, la perseverancia, la colaboración de mi equipo y la calidad de nuestra materia prima he logrado una rápida expansión transformando a Panificadora San Pedro en una empresa dedicada a la elaboración de productos de panadería y confitería que gozan de gran calidad, con la premisa de ofrecer a nuestros clientes un servicio distinguido en el rubro.
El nombre surge por cuanto San Pedro era en repetidas ocasiones quien aparecía en este logro. La operación para adquirir mi primer maquinaria se concreta en la ciudad de San Pedro, así como también el espacio físico donde levante esta fábrica, la calle San Pedro en el barrio de Mataderos, donde crecí.
San Pedro fue un distinguido discípulo por su fuerte personalidad, erigiéndose frecuentemente en portavoz del grupo. Se aferra a Jesús con la mayor fidelidad, firmeza de fe y amor íntimo; atropellado tanto de palabra como en sus actos, está lleno de fervor y entusiasmo. Hoy me siento identificado también con su personalidad ya que con esa misma fuerza, fe y entusiasmo que lo caracterizaba, levanté esta empresa que día a día intenta satisfacer las necesidades del consumidor.
Panificadora San Pedro representa para mí una gran satisfacción, en ella desarrolle todo lo que aprendí de mi familia, los valores, el esfuerzo y la tenacidad, siendo el lema que todos los días me motiva a seguir mejorando nuestros servicios.